"El libro de Marjaana Kella investiga la naturaleza del retrato fotográfico: cómo, o si la descripción de la fisonomía superficial de la fotografía nos dice algo de su carácter interior y psicología. Por supuesto, formamos juicios sobre las personas desde su apariencia visual, pero cuando nos encontramos con ellos también tenemos el beneficio de observar la forma en que se mueven y hablan.
Entonces, ¿qué ventaja nos da la fotografía? Como Kella escribe: «Una fotografía es muda y silenciosa. Es por eso que podemos observar lo que se exhibe de una manera muy especial. «La inmóvil quietud de la fotografía es un factor vital, que nos permite escudriñar un momento suspendido con gran intensidad. Además, la concentración en la superficie deja espacio para que nuestra imaginación interpretativa funcione. Y, sin embargo, la calidad de la estasis en una fotografía no siempre es la misma, como demuestra el fascinante libro de Kella. Ella muestra dos cuerpos de trabajo aquí, una serie de estudios de nucas, el otro, retratos de personas en trance hipnótico.
La diferencia es instructiva. Los retratos de la parte trasera de la cabeza son totalmente inmóviles, congelados, casi totalmente no-gestuales. Estamos obligados a observar la forma y la textura en el más mínimo detalle. Los retratos de la hipnosis son también están inmóviles, pero no congelados de la misma manera. Sigue habiendo una sensación de movimiento, de expresión facial y de gesto corporal. Sin embargo, los gestos no son «normales» y nos dejan buscando pistas en la superficie para formular nuestra lectura. Lo que emerge es una demostración erudita y convincente del enigma que es la fotografía. (Texto de A History, volumen II)"